Y llegamos a final de Vietnam, la última parada: el Delta del Mekong.
Llegamos a un pueblo llamado Cai Be, donde nos subimos a una lancha para recorrer el mercado flotante de venta al por mayor. Me esperaba otra cosa más llamativa, pero todo tiene su aquel.
Y el río tiene un color muy apetecible, ¿verdad? ;)
Visitamos una serie de talleres en los que hacían papel de arroz, pasteles de coco y de otras cositas, licores de serpiente,.... En cada uno de ellos te invitaban a tomar té, algo de fruta y a probar lo que hacían.
Evidentemente es una "invitación a comprar", nosotros sólo cogimos unas barritas de caramelo con sémola y almendra (me vuelven loca) y té de jazmín (a pesar de que me chiflaría poder disfrutar del té, es algo que se me resiste o es un "té" falso de frutas, y sólo algunos, o no soy capaz...., pero el de jazmín con miel en lugar de azúcar y un poco de lima...todo un descubrimiento).
Siguiendo la excursión, nos llevaron a una zona en la que se formaron unas islar a partir de los lodos, para hacer un recorrido en otra barca más pequeña, que es la que podéis ver más abajo. La verdad es que fue genial, un recorrido muy bonito y relajante.
Aquí el colega, que se quedó dormido mientras fumaba.
El delta del Mekong, aquí queda el mar a 100km y Camboya a 130 km.
Cogiendo caracoles y almejas en las "apetecibles" aguas.
Continuará....